miércoles, 21 de enero de 2015
Esperanza . ¡ A Dios !
Parecía algo inevitable. Era tan descarado ...
Por una parte, los hechos
Las cámaras, lo captaron con total claridad y lo pudimos ver millones de personas tanto en España como en el extranjero
Las declaraciones de los testigos, fueron contundentes
Los informes policiales detallaban los hechos con todo lujo de detalles
La motocicleta policial, fue derribada por el vehículo en cuestión que pilotaba la tal Esperanza
La "persecución" posterior y la llegada al garaje, fueron recogidas con bastante nitidez
De la otra parte una vez más mentiras y más mentiras.
Mentiras pronunciadas con el mayor desparpajo imaginable
Mentiras de quien está convencida de que no se han enterado quién es ella
Mentiras en las que trataba de involucrar incluso a alguna célula terrorista
Mentiras que ni los miembros de su partido, acostumbrados a ellas, creerían
Pues bien
Una vez más los españoles de a pié, estábamos convencidos de que esta vez sí. Esta vez no le libraba ni el Cristo de los delincuentes
Al parecer el citado cristo, debió de pensar que no hacía falta su intervención directa. Le habían informado que un Juez, (casualidades de la vida), el mismo que debía juzgar los hechos, había visto la luz
Esa luz debió de iluminarle en demasía. Ha decidido exculparla de los cargos presentados por la policía y refrendados por testigos y cámaras.
En su opinión no existen evidencias de que la señora haya sido consciente de los requerimientos de los agentes
Imagino que el siguiente paso
Por parte de esta dulce ancianita, en buena lógica, será presentar una querella contra policías, cámaras y testigos así como contra todos los ciudadanos que vimos lo que estaba ocurriendo
Por parte de la Policía, aun a sabiendas de que es inútil, presentar el correspondiente recurso a ver si esta vez toca un Juez "ciego" como la diosa justicia
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