domingo, 1 de marzo de 2020
La España vacía
No, no me he equivocado. La expresión "España vaciada" puesta de moda por los medios de comunicación, me sugiere que, desde fuera, hemos sacado a la gente de sus casas y de sus pueblos. Tal vez también sugiere que nos hemos llevado sus riquezas. Nada más lejos de la realidad
El concepto "España vacía" indica que esos pueblos se han vaciado, (han sido abandonados o casi) desde dentro. Sus habitantes son los que, en su momento se marcharon dejando sus casas y sus pueblos y que ni han vuelto ni piensan volver
Son pueblos en los que la gente sobrevivía a base de una agricultura y una ganadería precarias. Pueblos de tierras pobres, la mayoría con climas extremos que, en su momento, no pudieron crecer.
Las posibilidades de una familia para salir adelante, para dar a sus hijos una buena formación académica, unas atenciones sanitarias adecuadas y la esperanza de un futuro mejor, pasaba por dejar el pueblo e ir a las zonas donde pudieran trabajar, disponer de una cierta calidad de vida y tener unas ciertas garantías de un futuro digno
Así que muchos pueblos, se quedaron sin gentes que trabajaran esas tierras que no les pertenecían y por las que acababan pagando mas de lo que ingresaban
Ahora, muchos años después solo quedan unos pocos ancianos que sobreviven con una mínima pensión, unas migas, gachas, unos talos o como quiera que se llamen, Esos platos que algunos pretenden elevar a la categoría de grandes manjares
Por diversas razones unas pocas familias, generalmente ajenas a ese pueblo, han decidido instalarse en él. Compran casas y tierras a precio de ganga y trabajando en la ciudad o haciéndolo por internet viven con bastante holgura y se autodenominan "la esperanza del pueblo" .
Lo que no es posible es que en cada pueblo se monte un ambulatorio, un instituto, un hipermercado, una línea regular de autobuses, ...
Una posible solución es que sus habitantes con la ayuda de quienes abandonaron el pueblo y con una pequeña aportación del Estado en forma de créditos blandos, se construyan nuevos pueblos en los que alojar a los habitantes de la región hoy día dispersos. Se trataría de pueblos grandes con suficientes habitantes para que resultaran viables ambulatorios, comercios, escuelas, ...
Estas nuevas ciudades atraerían, sin duda, a muchos de los que abandonaron el pueblo por una viuda mejor (que no siempre consiguieron)
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