Muchos diréis que una rata es un animalito que tiene todos los derechos a vivir y con eso estoy de acuerdo.
El problema surge cuando este animalito entra en nuestra despensa Habrá gente partidaria de intentar por medios pacíficos hacer que se vaya y que regrese a su "casa"
Podemos intentar hablar con ella (no escuchará). Podemos "acojonarla" enseñándole una escoba(no se asustará). Podemos retirar todos los alimentos a su alcance (es inútil). Podemos ...
Pero ¿si el animalito nos hace frente? (algo habitual en las ratas) O, rizando el rizo, vemmos a este animalito paseándose por la cuna de nuestro "bebé" mientras este duerme (nada extraño si se conoce el comportamiento de las ratas). ¿Seguimos pensando en sus derechos?
Yo personalmente NO
Un paralelismo con esta situación, está en el sufrimiento de los ciudadanos y en que, probablemente, se extienda a otros países como Suecia o Finlandia (según la últimas amenazas de la rata)
Se ha intentado el diálogo y se ha reído del mundo
Se le ha enseñado la escoba y también se ha reído
Se le han bloqueado algunos recursos económicos y se ha "descojonado"
Se ha metido en la cuna y ha asesinado a personas indefensas incluidos "bebes" y seguirá haciéndolo
Me duele ver a gente que en esta situación clama por los derechos de los animales. Claro mi "bebé" está muy lejos de la rata es el del vecino el que está siendo mordido
Esos manifestantes que vociferan pidiendo seguir intentando dialogar con la rata, dadas las convicciones que manifiestan, deberían ir a Ucrania, para desde la cuna del " bebé del vecino" dialoguen con la rata, mientras esta le muerde una y otra vez.
Tal vez entonces, pidieran ayuda, para que ese "dulce animalito" no asesine al bebé del vecino
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