jueves, 22 de octubre de 2020

¿Dónde coño, están los médicos?

   Siempre me he sentido orgulloso del funcionamiento de la atención sanitaria en Euskadi. En este momento estoy en una situación de cabreo máximo y empiezo a avergonzarme de la Sanidad Vasca

   No se si en otras ciudades, provincias o autonomías ocurre lo mismo que en mi ciudad, provincia y autonomía, la pregunta que me hago es  ¿Dónde coño están los médicos?

   En un principio pensábamos, así nos lo vendieron, que estaban luchando a brazo partido contra la pandemia. Les animamos, les aplaudimos... Eran héroes

   En aquella primera oleada, era casi imposible encontrar un médico que te atendiera. Las cosas de todos los días; una alergia, un dolor de oídos, unas anginas, ... vamos esas cosas de andar por casa y que antes de la  pandemia nos las solucionaban " rápidamente o nos mandaban a un especialista que nos atendía en un plazo razonable ( al menos en Euskadi) dejaron de solucionarse.

   Con la pandemia, empezó a ser casi imposible que tu médico de familia te recibiera. Era incluso casi imposible, entrar en un ambulatorio. A lo más que se podía aspirar era a una consulta telefónica que antes se podía concertar por internet; Ahora esto también es muy complicado.

   ¿Pretenden hacernos creer  que los médicos de atención primaria están totalmente absorbidos por la lucha contra el virus?¿Pretenden hacernos creer que están todos en primera línea y que por eso hemos de sufrir con nuestras pequeñas enfermedades? Si así fueran las cosas habría hostias en el frente. Los hospitales estarían colapsados hasta el punto de no poder caminar por los pasillos, pero no por el número de enfermos  sino por el de médicos

   Una situación, que refleja bastante bien la realidad , sería la de un niño que vuelve del colegio con dolor de garganta. Sus padres intentan concertar una cita con su médico de cabecera y llaman a su ambulatorio. 

   La  recepcionista le hace una serie de preguntas sobre la dolencia del niño  y le invita a solicitar una cita por Internet. Acto seguido cuelga el teléfono

   El padre muy cabreado vuelve a llamar y utiliza otro "tono de voz" que resulta más convincente. La recepcionista le informa que va a pasarle con el médico de guardia y empieza la tortura de la musiquita. Pasados unos cuantos minutos, que se hacen eternos, un supuesto médico ( y digo "supuesto" porque no se identifica ) sin preguntar qué le pasa al niño, dictamina el confinamiento de toda la familia  hasta que se confirme que el niño, no está enfermo de coronavirus. También suele ocurrir que sin tan siquiera ver al niño, le recete una determinada medicación ; Lo que puede ser muy peligroso

   Con los médicos especialistas, la cosa es aún más grave. Si tenías cita desde hace un año ( es mi caso) acudes a la consulta el día que te corresponde y la recepcionista de turno te intenta explicar que hace un par de meses se te informó del cambio de fecha de la consulta. Dice: "te llamamos por teléfono, te mandamos un mensaje y también una carta" Ni la llamada existió, ni el mensaje aparece, y la carta,  se la debió de quedar el cartero (es que el hombre hace colección) 

   Si agachas las orejas y tienes suerte te darán otra cita para dentro de cinco o seis meses;  cita que probablemente nunca tenga lugar

   Si subes un poco el tono, pueden llegar a decirte que "mañana te llamará el médico por teléfono" una vez mas, si tienes suerte, te llamará alguien

   Si tu cabreo es serio, pero que muy serio, una de dos, o llaman a seguridad o te pasan directamente a una consulta

   ¿Debo suponer que los médicos de familia se han asustado con el posible contagio y se han ido de vacaciones? ¿Están de huelga y no nos hemos enterado? ¿han decidido trabajar un par de horas al día y solo por teléfono? ¿Acaso...?

   Lo que si es cierto que una vez más son los más humildes del escalafón,  los recepcionistas, los que tienen que sacar las castañas del fuego a todos estos "profesionales" que están, al parecer escondidos

   No soy creyente, pero rezo todos los días para que que salgan de sus escondrijos, vuelvan al lugar en el que deberían estar y nos traten como a  personas que con sus impuestos pagan sus servicios y de paso que piensen que si recurrimos a ellos no es por capricho sino porque estamos jodidos, a veces, incluso muy jodidos y en ocasiones los hay "tan tontos" que se mueren



sábado, 3 de octubre de 2020

¿Ustedes le votaron? ... Yo NO


Pensaba, Sr. Casado, que usted ya había pronunciado las mayores estupideces y mentiras, que imaginarse uno pudiera , tratándose de un político y además Presidente de su partido (vamos, "El Jefe")

Su última estupidez no se si me hizo reír por su calibre o llorar por lo que pueda ocurrir en este País si usted llegara al Poder

Afirma:

" A Felipe VI lo votamos los españoles. A Garzón y a Iglesias no"

Una frase para la gloria. Una frase digna del epitafio  de cualquier "Rey" que se precie (bastaría con cambiar el nombre). Una frase que encierra las grandes mentiras de este País. Una frase...

No me he perdido ni una sola de las consultas, electorales o de otra índole. Estas "consultas" se llevan a cabo mediante unas papeletas donde figura la cuestión planteada (si se trata de un referendum ); o unas listas de nombres entre los que elegir; o una serie de papeletas de diversos partidos políticos entre los que elegir los Diputados que nos representarán.

Pues resulta que en ninguna ha aparecido el nombre de "su majestad Felipe VI" ; tampoco el de "Felipe VI" ni ningún otro que identifique a quien se considera Rey de los españoles. Sin embargo sí he visto papeletas en las que figuran Alberto Garzón y Pablo Iglesias; y cosas del destino, también figura un tal Pablo Casado  

Tal vez haya otras elecciones, en una España paralela" que solo usted parece conocer. Tal vez sean las elecciones de esa España paralela, las que le alzan a usted y a su partido como ganadores indiscutibles de cualquier consulta electoral

Espero, que quienes le votan a Usted y a su partido, se replanteen su opción de cara a nuevas elecciones y piensen, con un mínino de sensatez, que este País tiene que dejar de ser un "País de Pandereta"  y feudo de unos cuantos nostálgicos que siguen afirmando que con Franco, los españoles vivíamos  mejor